Sufriendo por la causa de Cristo

"...Y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. Y ellos salieron de la presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer afrenta por causa del Nombre.” Hechos 5:40-41.

Objetivo: Enseñar a los hermanos y hermanas que es una bendición sufrir por la causa del Señor Jesucristo.

Introducción: Siempre hay personas que se oponen a la predicación del evangelio. Tenemos en nuestras ciudades personas endemoniadas que se enfurecen con el mensaje de nuestro Señor Jesucristo, pero nosotros tenemos que seguir predicando porque también hay muchas personas que están abiertas de la palabra de Dios, Prediquemos pensando en los que van a recibir el mensaje no en los que no lo van a recibir

I.     Dos clases de personas  encontraras siempre que prediques la palabra de Dios.

1. Los que se enojaran cuando te oigan hablar. Hechos 5:33 dice: "Ellos, oyendo esto, se enfurecían y querían matarlos". Estos son los que en Nuestros tiempos se burlan de nosotros y se nos oponen. Y hay muchos creyentes que cuando se encuentran con este tipo de personas se desaniman y ya no quieren seguir predicando, pero yo quiero decirte hoy lo que Dios te dice a ti cuando sufres por causa de su nombre. La Biblia dice:  “Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo. Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielo; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros". Sigue predicando la palabra a pesar de la oposición porque Dios tiene una recompensa grande para ti.

2.  Los que recibirán la palabra con gozo. Hechos 5:12 dice: "De los demás, ninguno se atrevía a juntarse con ellos; mas el pueblo los alababa grandemente". Nota que dice: "...Mas el pueblo los alababa grandemente". Estos eran los que si recibieron la palabra. Entonces podemos decir que aunque siempre hay personas que se opondrán a la obra de Dios, también abran muchas personas que recibirán el mensaje con gozo, y nosotros debemos predicar pensando en los que van a recibir la palabra no en los que no la van a recibir. Siempre que hable de Jesús hable con la seguridad que la gente recibirá la palabra.

Conclusión: Jesús dijo en Juan 15,20, "...Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardaran la Vuestra". Siga predicando. Si le tocara sufrir por causa de Cristo no se desanime, Dios tiene una recompensa para usted. Y recuerde Hay mucha gente que si recibirá el mensaje. Por amor a ellos siga predicando.