"Y los bendijo Dios, y les dijo fructificad y multiplicados; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre La tierra" Génesis 1:28.
Objetivo: Aprender que el deseo de Dios es bendecir sus criaturas.
Introducción: Mucha gente tiene la idea de un Dios malo, de un Dios que no se interesa por lo que pasa aquí en la tierra, pero esa idea es una idea equivocada de lo que Dios realmente es. Dios es bueno y el deseo más grande de su corazón es bendecirte. Esta noche yo te quiero invitar a que recibas la bendición de Dios en tu vida.
I. DÍOS es Un DÍOS de bendición. Génesis 1:29 dice: "Y los bendijo Dios..."
Esto fue lo primero que Dios hizo con el hombre el día que lo creo, Dios lo bendijo, Dios le hizo un huerto solo para él, lo lleno de regalos etc. Así es Dios es un Dios bueno, es un Dios de bendición.
II. La desobediencia aleja al hombre de la bendición de Dios.
Isaías 59:2 dice: "Pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados ha hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír" Salmo 101:11-16 dice: "Pero mi pueblo no hoyo mi voz, e Israel no me quiso a mí. Los dejé, por tanto, a la dureza de su corazón; Caminaron en sus propios consejos. ¡Oh, si me hubiera oído mi pueblo, si en mis caminos hubiera andado Israel! En un momento habría yo derribado a sus enemigos, y vuelto mi mano contra sus adversarios. Los que aborrecen a Jehová se fe habrían sometidos, y el tiempo de ellos sería para siempre. Les sustentaría Dios con lo mejor del trigo, y con miel de la peña les saciaría. La Biblia afirma que es la desobediencia del hombre la que lo aleja de las bendiciones de Dios. Isaías 59: 9-12 dice "Por eso se alejo de nosotros la justicia, y no nos alcanzo la rectitud; esperamos luz, y he aquf que tinieblas; resplandores y andamos en oscuridad. Palpamos la pared como ciegos, y andamos a tientas como sin ojos; tropezamos a mediodía como de noche; estamos en lugares oscuros como muertos. Gruñimos como osos todos nosotros, y gemimos lastimeramente como palomas; esperamos justicia y no la hay; salvación, y se alejo de nosotros. Porque nuestras rebeliones se han multiplicado delante de ti, y nuestros pecados han atestiguado contra nosotros;..." Nadie que viva en pecado puede esperar una bendición plena. Dios tiene un profundo deseo de bendecir al hombre. Pero el pecado aleja la bendición del hombre.
III. La obediencia nos acerca a las bendiciones de Dios.
Deuteronomio 11:26-27 dice: He aquí yo pongo hoy delante de vosotros la bendición la bendición y la maldición. La bendición, si oyereis ¡os mandamientos de Jehová vuestro Dios, que yo os prescribo hoy". La bendición de Dios para tu vida está condicionada a tu obediencia a El. Dios no tiene la obligación de bendecir a un desobediente.
Conclusión: Dios es un Dios de bendición y su deseo más grande es bendecirte, pero el pecado estorba esa bendición que Dios te quiere dar. Afortunadamente hay una solución para tu pecado. La solución es Jesús. Entrégale tu corazón esta noche y empieza a disfrutar las bendiciones de Dios.
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