Calendario hebreo
La particularidad del Calendario Judío es un potente factor para la supervivencia del Pueblo Judío. El respeto del Shabat y del resto del las Festividades crea un lazo definitivo y reúnen las fuerzas del pueblo judío.
El calendario judío se basa en los ciclos de la naturaleza. Las unidades de tiempo visibles determinados por los fenómenos de la naturaleza son tres: el día, el mes y el año.
El calendario judío se basa en los ciclos de la naturaleza. Las unidades de tiempo visibles determinados por los fenómenos de la naturaleza son tres: el día, el mes y el año.
El día: la traslación de la Tierra sobre su eje frente al sol de ocaso a ocaso, a diferencia del calendario gregoriano, que fija el comienzo del nuevo día a medianoche.
El mes: Mientras que el calendario gregoriano solar, se basa en el movimiento de la tierra alrededor del sol, el calendario hebreo es lunar, y está basado en los giros orbitales de la luna alrededor de la tierra.
El año: El calendario judío está basado en una combinación de la traslación del sol y de la luna. La órbita lunar es la base para contar los días del mes y la órbita del sol es la base para el cómputo de los días y los años. En la rotación de la tierra sobre su eje alrededor del sol, se establece la diferencia entre un día y el siguiente, por cuyo motivo el día del calendario hebreo comienza al anochecer, con la puesta del sol, prolongándose hasta el ocaso del día siguiente.
Por esta razón, las fiestas judías y el Shabat dan comienzo al anochecer y terminan al día siguiente al anochecer.
Por esta razón, las fiestas judías y el Shabat dan comienzo al anochecer y terminan al día siguiente al anochecer.
Doce son los meses de un año normal: Nisán, Iyar, Siván, Tamuz, Av, Elul, Tishrei, Jeshván, Kislev, Tevet, Shvat y Adar.
Shaná Meuberet: En el año biciesto, que ocurre siete veces cada diecinueve años, se anade un mes, llamado Adar Bet.
Dado que el número de días en el año lunar llega a 354, a fin de hacerlo coincidir con el año solar, hace falta agregar unos once días aproximadamente. Esta coordinación posibilita la determinación de las fiestas judías en el mes y la estación adecuada. Dado que no pueden agregarse al año fragmentos de mes sino meses completos, se espera la acumulación de treinta días sobrantes y se suma un mes más al año.
Dado que el número de días en el año lunar llega a 354, a fin de hacerlo coincidir con el año solar, hace falta agregar unos once días aproximadamente. Esta coordinación posibilita la determinación de las fiestas judías en el mes y la estación adecuada. Dado que no pueden agregarse al año fragmentos de mes sino meses completos, se espera la acumulación de treinta días sobrantes y se suma un mes más al año.